Ayer, con una goleada inapelable venció 5 a 1 a Bull Dog y se metió entre los cuatro mejores equipos del liguista. En una tarde en la que las cosas fueron redondas para los de Luciano Villarreal, que con mucha autoridad se ganaron un lugar más que merecido en las semis, un logro inédito en la historia "Gallega". Elio Cuello, Facundo Sierra, en dos oportunidades, Ignacio Díaz y Alberto Kunz anotaron los goles del "Albirrojo". Cristian Ramos estampó el único tanto de la visita.-
Con una calurosa recepción, el local saltó a la cancha con la premisa de que dependía de sí mismo para lograr su objetivo. Su rival, ya eliminado, venía con inferioridad y un plantel plagado de debutantes. La mesa estaba servida para un partido tranquilo. Más aún, cuando a los cinco minutos, Elio Cuello puso el 1 a 0 ante la mirada atenta de una defensa estática. Un gol providencial, porque le daba tranquilidad a Empleados y definía el pleito, a pesar de que faltaba mucho. Para completar la tarde soñada, Sierra anotó a los 15 y a los 18, dos goles que sentenciaban la historia. Con la clasificación en el bolsillo, Empleados no se amedrentó y siguió controlando las acciones. Bull Dog, no reaccionaba y el encuentro se jugaba con un sólo protagonista. El cuarto gol llegaría a los 37, cuando Ignacio Díaz definió con suma tranquilidad tras una corrida por la izquierda. El partido era un monólogo de Empleados, que si se lo proponía, podía anotar en cada aproximación. Sierra, Cuello y Díaz tuvieron sus ocasiones para estirar el marcador, pero el primer tiempo terminaría 4 a 0. Un resultado justo, con una gran producción, pero que se dio en una coyuntura muy favorable. Bull Dog, vino a cumplir y el resultado era lógico.
La segunda parte fue meramente decorativa, el partido estaba definido y ninguno de los dos equipos arriesgaría más de la cuenta. Empleados metió un par de cambios y siguió con la misma postura. Protagonismo y verticalidad fueron las cartas que jugó Luciano Villarreal. Bull Dog llegaría al descuento a los 15, cuando Cristian Ramos aprovechó una mala salida de Lede para acortar el score. Un espejismo, ya que la visita no tenía argumentos futbolísticos para igualar el resultado. Lo último en ataque del "Perro", fue una apilada magistral del Cristian Ramos, que eludió medio equipo "Gallego" y casi puso el segundo de los deroenses. Luego, todo fue de Empleados. El local manejo la pelota y los minutos pasaban. La tranquilidad del resultado y el aletargamiento de Bull Dog hicieron que el partido se planchara. A los 36, Alberto Kunz, puso cifras definitorias con un remate de larga distancia. 5 a 1 y felicidad en el complejo La Victoria. Sobre el cierre, los hinchas vivieron su fiesta, fuegos de artificio y el "dale rojo" decoraron un momento ideal. El pitazo final de Cejas desató el festejo. Empleados entró por primera vez a las semifinales de la LPF, con sobrados meritos. El "Gallego" cuenta con un plantel que combina la experiencia y la juventud. Con un entrenador que sabe a lo que juega y que logró ordenar a este equipo, que sin demasiados cambios con respecto a campañas anteriores, se puso el traje de protagonista. Un plantel que cuenta con un gran sentido de pertenecía y de amor por sus colores, con solidaridad y gran trabajo de equipo. Empleados es merecedor de este presente. Comenzó de manera sinuosa, pero Villarreal logró enderezar la nave y los resultados llegaron. Al margen de que la tarea está cumplida, Empleados se ilusiona y buscará un lugar en las finales. KDT será el rival, un equipo que exigirá al máximo al "Albirrojo". Empleados festeja y sigue en carrera.
P.L.P.
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